A los candidatos a la Alcaldía de Izamal
A los candidatos al Congreso local por el Distrito XV
A los miembros de los diferentes partidos políticos
RECIBIMOS POR CORREO EL SIGUIENTE MENSAJE CON MOTIVO DE LAS PROXIMAS ELECCIONES.
Al pueblo de Dios que peregrina en Izamal
¡El Señor les de la Paz!
Con el saludo que fue revelado a San Francisco de Asís por el Altísimo, Omnipotente y Buen Señor, nosotros, los Hermanos Menores, herederos de la espiritualidad de San Francisco y Santa Clara de Asís, que en el siglo XIV, fundaron el Movimiento Franciscano, que ha renovado a la Iglesia y a colaborado en la construcción de un mundo mejor, saludamos a todos los hombres y mujeres que viven en este municipio.
Conscientes de que nuestra misión evangelizadora pasa las fronteras de este municipio, por tener el privilegio de atender el Santuario de Nuestra Señora de Izamal, Reina y Patrona de Yucatán, lugar sagrado donde llegan personas de toda la Península de Yucatán, de todo el país y del extranjero a venerar la sagrada Imagen de María, la Madre de Jesús, también saludamos a las personas que se encontrarán con este escrito.
La presente es una animación, una exhortación que queremos compartir como miembros de la Iglesia de Jesús y como ciudadanos de este país.
El próximo 16 de mayo, en el Estado de Yucatán, tendremos las elecciones en las que se renovará a las autoridades civiles: El Congreso local y 106 municipios.
Nuestra reflexión parte de una mirada de la realidad desde nuestro seguimiento de Jesús de Nazaret. Nuestros Obispos afirman que “… en México se está deteriorando, en la vida social, la convivencia armónica y pacífica…” (Cfr. Que en Cristo nuestra Paz, México tenga vida digna, 10), Izamal no puede estar aislado de esta realidad. Somos testigos de la creciente depauperación de la población a consecuencia del modelo económico vigente que según los analistas, entre ellos el más alto magisterio católico de nuestra nación, se ha deteriorado (Cfr. Que en Cristo nuestra Paz, México tenga vida digna, 28 - 39). Una gran cantidad de personas de nuestro municipio sufren del fenómeno de la migración y han sido expulsadas hacia las grandes urbes en busca de un mejor nivel de vida. El modelo de desarrollo actual no responde a las exigencias fundamentales para una vida digna de la población. No hay trabajo, los salarios son raquíticos, la educación no está garantizada para todos los habitantes del municipio, pues carecemos de varias escuelas de nivel medio superior y no hay ninguna de nivel superior; los jóvenes tienen pocas o nulas oportunidades de continuar con la educación gratuita que debe brindar el Estado; los servicios de salud dejan mucho que desear, pues no contamos con centros u hospitales que atiendan realmente las necesidades sanitarias mas urgentes de la población.
Ante esta realidad, percibimos en toda la población un clamor que sube al cielo, de diferentes maneras. Nosotros, Franciscanos, nos unimos a este clamor, pues compartimos con la gente no solo sus gozos y alegrías, sino sus penas, tristezas y desesperanzas.
Exhortamos a los candidatos de los diferentes partidos, para que se comprometan a buscar, en unión con el mayor número de personas e instituciones, un modelo de desarrollo integral fundado en la justicia social.
Les pedimos, que fuera de todo interés, se empeñen por abrir el comercio y crear fuentes de trabajo dignas y duraderas.
Les suplicamos, en nombre de Dios, detengan la venta ilegal de drogas y la venta clandestina de alcohol que tanto destruye a nuestros jóvenes y adormece a los adultos y a todos deja indiferentes, sin ganas de buscar un mejor nivel de vida. La drogadicción y el alcoholismo son factor importantes en la debilitación del tejido social.
Sabemos que las autoridades han logrado posicionar al municipio en el ámbito nacional e internacional; cada vez más se conoce a Izamal, como Pueblo mágico de México, como la ciudad más limpia del país, incluso sabemos que se busca que se declare Patrimonio cultural de la humanidad. Reconocemos este esfuerzo. Sin embargo, los títulos para la ciudad no son suficientes, pues lo más importante es trabajar por elevar la calidad de vida de la población y dar vida digna a todos en una convivencia fraterna, que incluya al medio ambiente.
Exhortamos a toda la comunidad a ejercer su derecho a votar el próximo 16 de mayo conscientemente; de manera que en un ejercicio de democracia madura, busquemos en la elección de las autoridades civiles, a quienes puedan ser verdaderos servidores públicos.
Nosotros Franciscanos, hacemos nuestros los compromisos, de manera local, los hechos por los Obispos mexicanos en el ya citado documento Que en Cristo nuestra Paz, México tenga vida digna y como miembros de la Orden Franciscana nos ofrecemos a ser Instrumentos de Paz que tenga como base la búsqueda de la Justicia.
Atenta y fraternalmente:
Fr. Tomás González Castillo, OFM
Guardián
Fr. Israel Bernal Fernández, OFM
Párroco y Rector del Santuario
Fr. Octavio Valdés Melchor, OFM
Vicario local y parroquial
Fr. Oscar Aguilar Jiménez, OFM
